El pasado 31 de Enero falleció mi abuelo Julio, mi yayo. Tenía 86 años. Al yayo le quería mucho y lo mejor es la cantidad de buenos recuerdos que siempre me quedarán de él. Recuerdo cuando era pequeño y me quedaba en casa de mi Tita a dormir algún viernes o sabado compartiendo la cena con él, la primera vez que fui al estadio del Salamanca o sus expresiones "desde luego" y "jorobar". Recuerdo cuando me daba billetes y yo le pedía monedas, o sus acertados comentarios de fútbol. También verlo trabajando en su taller o tomando su vino diario en algún bar cercano. Son muchos más los recuerdos y las imágenes que podría seguir describiendo. Todas ellas quedarán para siempre en mi memoria.
Un beso enorme Yayo, te recordaré siempre.
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