sábado, 25 de febrero de 2012

Sobre la sede de la final de Copa del Rey 2012

No sé dónde se jugará finalmente la final de la Copa del Rey. Pero quede claro que no jugarla en el campo neutral con mayor capacidad posible es un auténtico fraude para todos los aficionados que queremos asistir a ese partido. El partido que todas las temporadas supone una auténtica fiesta del fútbol español. Los finalistas son el Athletic y el Barça, los dos equipos a los que tengo más admiración y simpatía. La final se preveé un auténtico partidazo con dos equipos de lujo. Y la polémica está servida gracias al fanatismo y papanatismo de este país. Resulta que la sede lógica sería el estado Santiago Bernabéu, con aforo de 80.000 aficionados. Teniendo en cuenta que será un partido donde conseguir una entrada será tarea complicada y que los precios estarán por las nubes, calculo entorno a los 200€, poder asistir "in situ" sería un verdadero reto. 

Pero resulta que el dueño del estadio no quiere que se celebre ahí la final, posiblemente porque la juega su rival histórico. Fanatismo puro y duro donde los únicos perjudicados somos los que queremos asistir a ver el partido. La razón de toda esta pasión y todo este negocio. El Real Madrid en esta final no pinta nada. Las posibles alternativas son los estadios de Mestalla en Valencia o el Vicente Calderón en Madrid. Pero su capacidad está entorno a los 40.000 asientos, es decir la mitad. 40.000 aficionados al fútbol, insisto, lo más importante de todo, perjudicados por unos fanáticos que no ven más allá de sus colores. Si conseguir una entrada sobre 80.000 es un reto, conseguirla sobre 40.000 puede ser una auténtica quimera, por no hablar de su precio. 

Si finalmente no se juega en el estadio Santiago Bernabéu será un fraude para quienes queremos ir. Perderá el fútbol y sus aficionados, sobre todo los de Barça y Athletic. Y para el año que viene cuando la final la jueguen, por poner un ejemplo, el Real Madrid y el Valencia, y soliciten jugar la final en el mejor campo posible, neutro, y con mayor capacidad, probablemente le dirán que no porque van a sembrar césped nuevo, o los focos están desgastados o los esperpénticos sanitarios haya que renovarlos. Y entonces los fanáticos que ahora jalean serán los perjudicados. Pierde el fútbol.


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