¿Se dopan? Arrieros somos...

Pues pruébalo, demuéstralo. En el deporte existe mucha envidia y cuando algunos deportistas ganan, ganan y vuelven a ganar, el objetivo de algunos es malmeter y difamar, porque como decía aquel, siempre algo queda. En Francia desde hace mucho nos la tienen jurada y no pierden ocasión para insinuar que los mejores deportistas españoles utilizan el doping para mejorar su rendimiento y así ganar contínuamente. Saben que mienten y no les importa. Pero que el deporte español está en la cima es un hecho, sin querer individualizar en Gasol, Nadal y compañía. Nadie puede discutirlo salvo que seas un necio envidioso.

Sin embargo con toda la polvareda que el tema del doping ha levantado, me acuerdo de lo que ocurrió en este país no hace tantos meses antes de la archiconocida batería de clásicos Barça-Madrid que tuvimos en el mes de abril. Y es que arrieros somos y en el camino nos encontraremos.  

Al periodista de la cadena Cope Juan Antonio Alcalá le hicieron llegar de parte del Real Madrid la siguiente información: "El Real Madrid tiene pensado pedir mayores controles antidopaje porque en el conjunto blanco piensan que los doctores que trabajan en el FC Barcelona son de dudosa reputación". La noticia es fácil contrastarla en internet. Resulta que en aquel momento era bueno intentar desestabilizar y desprestigiar al rival más admirado en todo el mundo poniendo en duda sus triunfos. Y al señor Alcalá, como suele decirse, y como vino a reconocer él mismo públicamente, se la metieron doblada, eso sí, con toda intención. Y mientras tanto los altavoces blancos funcionando a todo volumen. Patético donde todo vale y el posible fin justifica los medios.

El Barça obviamente tuvo que salir a defenderse, igual que ahora hace Rafa o Pau. "Ante las graves insinuaciones difundidas ayer por la noche por la Cadena COPE, el FC Barcelona quiere expresar públicamente su absoluta indignación por estas infundadas alusiones que vinculan el club con prácticas de dopaje y quiere manifestar su rechazo ante actitudes que no tienen nada que ver con el juego limpio y que afectan gravemente a la imagen de la competición. El FC Barcelona exige una rectificación inmediata y anuncia que sus servicios jurídicos ya estudian las acciones legales que es necesario emprender para defender el honor del club, de sus técnicos, jugadores y servicios médicos, objetivo por el cual está dispuesto a llegar a las últimas consecuencias".

La respuesta fue la mejor y la que más duele: ganar y seguir ganando. (El Barça acaba de recibir el premio LAUREUS como el mejor equipo deportivo del mundo, el equivalente a los premios Nobel del Deporte, en breve post sobre ello). Y así terminó el dopaje del Barça. Buen camino a seguir por los Gasol, Nadal, Contador, Selección y demás para callar bocas de necios envidiosos.