sábado, 10 de julio de 2010

La final soñada

España vs Holanda. ¿Qué mejor final puede haber de un Mundial de fútbol? Las dos apuestas más atractivas se verán las caras mañana en mi final soñada cuando comenzó el Mundial. Y es que después de España, siempre he tenido una especial simpatía por la tradicional “Naranja Mecánica” de Michels y Cruyff.

Pero durante los últimos dos años ha habido una Selección que por el fútbol que practica se merece ser campeona del Mundo. España demostró ser la mejor hace un par de años en la Eurocopa de Austria y Suiza, y ahora está demostrando que es la mejor en el Mundial de Sudáfrica. Así quedo reflejado en Semifinales contra la mejor Alemania en muchos años. Y es la mejor de la mejor manera posible: jugando al fútbol de verdad, tocando, con posesión de balón, haciendo correr a los rivales hasta la extenuación, presionando y manejando el partido. Ver a España hoy por hoy es un placer, el mismo que ver al Barça de los últimos años. No en vano hasta siete jugadores azulgranas juegan habitualmente en el once titular de Vicente del Bosque. Puyol y Pique como centrales aportando seguridad y formando el mejor tandem defensivo del Mundial. Busquets haciendo un papel impresionante como pivote defensivo en lo que ha sido un acierto total de Del Bosque al darle tanta responsabilidad. Xavi e Iniesta como los auténticos generadores de juego y los que marcan el estilo y la esencia del juego del equipo. Pedro como la nueva, enésima aportación azulgrana a la Selección nacional y el auténtico killer del área para finalizar las jugadas, David Villa, en punta de ataque. Un dato significativo: todos los goles conseguidos por la Selección han sido de jugadores del Barça. Importantes también por su buen papel Sergio Ramos y Capdevila en los laterales, y el gran criterio que ejerce Xabi Alonso en el centro del campo para iniciar las jugadas. Y que decir del gran Iker Casillas que siempre está cuando se le necesita. Fútbol de ataque, de posesión, de disfrute y deleite para el aficionado que se muestra orgulloso de ganar y de la forma de conseguir los éxitos. Un equipo que engancha por su forma de jugar. Y lo que está quedando claro: fútbol que gana títulos. Ganar un Mundial tiene que ser algo grandioso, mágico, inolvidable. Sólo de pensarlo se me pone la piel de gallina. La celebración será por todo lo alto, apoteósica, como la ocasión merece. Pero ganar este Mundial jugando así será algo inolvidable para todos los españoles y para todo el mundo que en Sudáfrica vio jugar a aquella selección que jugaba como los ángeles. El Barça viene demostrando desde hace muchos años esta filosofía y actualmente es el paradigma del fútbol espectáculo a nivel de clubes. Ahora le toca a la Selección dar el paso. Es el momento y la hora de demostrarlo. ¡Viva y Visça E S P A Ñ A! ¡¡Y esperando que el pulpo Paul acierte en su pronóstico!!

No hay comentarios: